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[« DÍAS 6 A 8 – GOLDEN POSES]

El ritmo de entregas en Pepe School Land aprieta. Durante la primera semana del Ejercicio Final hemos pasado de entregas semanales a entregas diarias, y a dos entregas semanales (lunes y jueves) desde la segunda semana y previsiblemente hasta la entrega final. El lunes pasado entregué el trabajo de Golden Poses que vísteis en el artículo anterior, y con el feedback de los compañeros y sobre todo de Dani he seguido trabajando durante la semana para mejorar y ampliar las Golden Poses para una nueva entrega.

Esta semana, además, tuvimos una clase práctica en la que Rafiki nos mostró su método a la hora de trabajar con video referencias, aplicando las técnicas que nos enseñó a principios de curso para extraer las líneas de acción y la expresividad en el análisis de referencias en vídeo.

Así pues esta semana he grabado mis propias video referencias de los personajes, recreando el acting que ya tenía planteado en las Golden poses. El objetivo es comprobar si las poses ya planteadas son eficaces, físicamente coherentes y descubrir la forma de transitar entre las mismas. Una de las enseñanzas más importantes que me he llevado de la clase magistral de Rafa es que, cuando trabajamos con referencias humanas, debemos beber de la fuente sólo en determinados pasos del proceso. La animación, al igual que el dibujo, es una recreación o reinterpretación de la realidad. Por tanto, a menos que trabajemos en un estilo hiperrealista, debemos huir de reproducir fielmente el modelo y buscar la esencia de la misma. El cerebro humano funciona por esquemas, y es una máquina realmente sofisticada de interpretación de la realidad, de modo que es capaz de abstraer elementos comunes que repetidamente encuentra en la información que recibe del mundo exterior (a través de los sentidos) para formar una especie de ideal o modelo abstracto que engloba las particularidades. El dibujo juega con esta forma de percepción y abstracción para completar o hacer posibles las propuestas exageradas, iconizadas o imposibles que muchas veces propone. Y sin embargo, no todo vale. Por muy excesivo que sea un estilo de dibujo, debe cumplir “aparentemente” las reglas de la física y la anatomía para que “nos la traguemos”. Si no es así, y aunque muchas veces no seamos capaces de saber exactamente porqué, la imagen nos resultará extraña y antinatural.

Los mismos principios se aplican en animación. Especialmente en estilos más “cartoon”, se pueden cometer verdaderas barrabasadas siempre que se respeten ciertas reglas que tenemos interiorizadas en el cerebro… y por supuesto, la cultura audiovisual del espectador juega un papel muy importante en este proceso. Debemos estar “preparados” con ciertos antecedentes antes de poder comprender y consumir una innovación artística. Un error común a la hora de utilizar referencias es intentar reproducir tal cual el movimiento del modelo humano. Igual que los personajes son sometidos a un proceso de caricaturización, debemos limpiar la acción. Aunque no lo percibamos conscientemente, un cuerpo humano realiza pequeños movimientos ajenos a la acción principal que la “ensucian” y llenan de “ruido”. Nuestra mente abstracta es capaz de ignorarlos y quedarse con la esencia del movimiento, pero en un proceso artificial y artístico nos interesa ofrecer el producto iconizado y potenciado. Será más atractivo visualmente y más efectivo en cuanto a narrativa. Por supuesto hay otros caminos experimentales en los que precisamente se investiga y prueba otras opciones, obteniendo resultados muy interesantes e innovadores.

Una vez definidas las Golden poses, proceso durante el cual debemos buscar referencias que nos ayuden a comunicar y potenciar el mensaje que queremos transmitir en cada momento de la historia, resulta de gran ayuda la grabación de videoreferencias. Si nos enfrentamos a un acting “inventado” podemos encontrar referencias para ciertas partes, pero rara vez coinciden con nuestro tiro de cámara, con la actitud o físico de nuestro personaje o con el acting en sí mismo que queremos ejecutar. Lo ideal sería contar con un actor profesional que pudiese representar para nosotros la escena, y trabajar así con una referencia de primera. A falta de estos recursos, los animadores usamos nuestras videoreferencias principalmente para estudiar el aspecto mecánico del acting. Es decir, una vez construidas las Golden poses a partir de referencias de calidad, las reproducimos (con mayor o menor gracia) para poder estudiar las dinámicas de los cuerpos al ejecutar ese acting: si nos giramos indignados, ¿será la cabeza la que tire del cuerpo, o el pecho de la cabeza?. Además, al reproducir el acting nuestros tics y movimientos inconscientes a menudo introducen elementos interesantes que pueden ayudarnos a enriquecer la animación, aportándole frescura.

Aquí podéis ver la videoreferencia que grabé para el acting de mis dos personajes:

 

Una vez tenemos nuestra video referencia, volvemos a repasar las Golden poses para enriquecerlas a partir del nuevo material y después comenzamos una fase de estudio de estas mecánicas de energías entre los elementos del cuerpo. Este estudio será la fase que aborde en los próximos días, en los que tengo que plantear las poses de transición entre poses principales.

Y aquí os dejo la nueva versión revisada de Golden poses que he presentado en la Escuela hoy mismo. Espero que os guste :)

 

[TO BE CONTINUED...]